La psicología detrás de por qué amamos recibir regalos corporativos
Descubre los secretos psicológicos detrás de por qué te vuelve loco recibir los regalos corporativos.


Según estudios de la Universidad de Harvard, recibir un regalo activa simultáneamente tres sistemas neurológicos:

El sistema de recompensa
Libera dopamina (la hormona del placer)

El centro de vínculos sociales
Produce oxitocina (la hormona del apego)

El área de memoria emocional
Crea recuerdos duraderos asociados a la marca
Un regalo corporativo bien elegido no solo hace feliz al empleado en el momento, sino que programa su cerebro para asociar emociones positivas con la empresa durante meses – Dr. Michael Norton, Profesor de Harvard Business School.


¿Por qué funciona mejor que el dinero?
La respuesta está en lo que los neurocientíficos llaman «el efecto de concretización emocional». Cuando recibes dinero, tu cerebro lo procesa de manera abstracta. Cuando recibes un objeto físico, tu cerebro forma conexiones emocionales tangibles.
Recibir un regalo despierta emociones positivas como sorpresa y gratitud, pero en el ámbito corporativo su impacto es aún mayor. Desde la psicología, un regalo representa reconocimiento y validación, dos necesidades clave para el bienestar emocional. Cuando un colaborador recibe un detalle, el mensaje que percibe es claro: “soy importante, valoran mi esfuerzo”. Esto fortalece la autoestima, incrementa la motivación y refuerza el sentido de pertenencia con la empresa. No se trata del valor económico, sino del significado: cuidado, empatía y reconocimiento. Los regalos corporativos son un puente emocional que transforma equipos en comunidades más comprometidas.



